a una gran esposa

El día más feliz de mi vida es cuando me he  sentido viva, plena conmigo misma y satisfecha con lo que realizó cotidianamente, un día feliz para mi dura veinticuatro horas, más aun cuando al vivirlo lo comparto con todas las personas que me aman, en realidad en mi vida se han presentado muchos días felices, por ejemplo uno de ellos fue un jueves diecisiete de marzo del 2011, el cual empezó a las 7am cuando  al despertarme me sentí viva, me levante, bañe y desayune tranquila alrededor de mis padres y abuelos, tome un delicioso café, unas galletas y un guiso que fue cocinado por las manos de mi madre, tenía que estar lista para cuando llegará la persona, que me peinaría y maquillara para un evento especial, mi boda por lo civil con Tom, recibí muchos mensajes a mi teléfono celular desde las siete de la mañana ese día felicitándome por tal acontecimiento, fue un día soleado con un cielo despejado, estuve nerviosa en todo momento, sentía un vacío en mi estomago a pesar de que ya había desayunado, al termino de mi arreglo por mi maquillista, me coloque mi vestido blanco el cual es un poco largo y bordado, me puse mis zapatillas blancas, y mis accesorios, para ese momento ya mis padres estaban listos, tomamos un coche para que nos llevara al registro civil, cuando llegamos ya se encontraba ahí Tom esperándome en la puerta de entrada con su familia, lo vi, nos sonreímos y me dirigí a él nerviosa, feliz, con una sonrisa plena, le pregunte ¿estas nervioso?, me contesto si, es el día bebe, le conteste así es, ¿con todo cielo?, le pregunte y el me contesto  ¡si, para toda la vida!, sentí como en ese momento mi estomago se revoleteaba aun más por la emoción, llegó la hora programada para la ceremonia, las 13 hrs. , la juez empezó con la ceremonia, sentía como Tom y Yo estamos nerviosos, nos sudaban las manos, note como la gente que estaba a nuestro alrededor escuchaba atenta, firmamos la acta, y nuestros testigos, al final de la ceremonia todos dijeron beso, fue tan feliz ese momento que se me rodaron unas cuantas lagrimas, más aun cuando Tom me dio un gran abrazo lleno de amor, alegría y felicidad, nos colocamos unos anillos que nos obsequio mi hermana y cuñado, todos aplaudieron, cada uno de los presentes nos dio abrazos deseándonos lo mejor,  nos tomaron muchas fotos, nos retiramos a casa e invitamos a comer a  todos los presentes a la ceremonia, fue algo sencillo pero con gran gusto y agradecimiento por acompañarnos a mi y a Tom a ese momento  especial.
 
ATENTAMENTE
 TU BEBE QUE TE AMA INMESAMENTE, Y AGRADECE A DIOS TU AMOR.

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tonyblue71@hotmail.com